en la que elegiremos el nuevo Parlamento Vasco.

domingo, 23 de septiembre de 2007

Y la moto, ¿qué?

Hoy acaba la semana de la movilidad y de la concienciación a la ciudadanía de la bondad del uso del transporte público. Correcto, asumible y apoyable. Pero una cosa me ha llamado la atención. El otro día cinco jóvenes, montándose en coche privado, en taxi, en tranvía, en buses, en metro y a pie "demostraron" que la bici y el taxi son los métodos más rápidos.

Pero es que en la metrópoli bilbaína, ¿la gente que vivimos, trabajamos y nos movemos en su entorno giramos alrededor de los cuatro calles principales? No. Ya se que lo más sano y ecologista es trasladarse a pie o en bici, pero hay distancias en las que estos sistemas no son asumibles. Y el transporte público no termina de cubrir todas las necesidades ni en espacios ni en tiempos.

Y entonces es cuando aparece la moto. ¿Que pasa con las motos? Por qué no se las promociona también como transporte alternativo al coche? Si uno tiene que trasladarse desde Sopelana a realizar cuatro gestiones a Rekalde, Castaños, Casco Viejo, Miravilla y volver, el sistema más ágil y barato es, sin duda, la moto. Creo que el Ayuntamiento va a ampliar el número de aparcamientos, lo cual me parece una medida excelente y aunque la bici me encanta, a veces, la ayuda de un motorcito viene muy bien.