en la que elegiremos el nuevo Parlamento Vasco.

viernes, 11 de marzo de 2011

AENA, sindicatos ... esto es una vegüenza

¿Se imaginan que porque el conductor del autobus que lleva al Real Madrid del hotel al estadio se declare en huelga se suspenda el partido en el Bernabeu? ¿Se imaginan que porque el taxista que suele llevar al presidente cántabro a La Moncloa, con las latas de anchoas y todo, se declare en huelga, los dos presidentes suspendan la cita? Suena ridículo ¿no?

El tema de las huelgas de los aeropuertos ya pasa de castaño oscuro. Se está jugando con "fuego" y las reacciones pueden ser de lo más imprevistas. No se puede permitir que se paralice el país, que se frustren las espectativas de millones de viajeros, que se juege con los puestos de trabajo de millones de personas, que se haga tambalear una de las principales fuentes de ingresos del país, porque unos trabajadores decidan realizar una huelga, a la que sin duda tienen derecho, pero cuyos efectos y consecuencias son desproporcionados a la labor que realizan.