en la que elegiremos el nuevo Parlamento Vasco.

domingo, 17 de mayo de 2015

En la sociedad de Internet, interesadamente, la democracia sigue dependiendo del papel.

Por enfermedad, por encontrarse en el extranjero, por incapacidad física… se me ocurre una docena de motivos que justificarían el absentismo a la hora de votar. Ninguno reprochable. 
Comenzamos en la Red la era del 3.0 y la Administración sigue poniendo en manos de los ciudadanos instrumentos antediluvianos con los que poder expresarse cuando llegan unas elecciones: depositando el voto en una urna o a través del correo ordinario. Y en ambos casos se requiere de la presencia física del votante, no se puede delegar.
A la persona que quiere y no puede participar se le está privando de un derecho constitucional. Hoy en día, con un DNI electrónico y un ordenador, es posible a través de Internet hacer la declaración de la renta, y muchas más gestiones. No entiendo por qué no se permite utilizar esta vía para participar en unas elecciones.
Sin duda, técnicamente es posible, pero evidentemente algo me dice que no interesa demostrar que se podría solicitar la opinión de la gente mucho más a menudo, de una manera muy sencilla y barata. Pero el voto delegado que asegura un puesto durante cuatro años no se quiere poner en peligro.
¿Habéis oído a algún partido hablar del tema?