en la que elegiremos el nuevo Parlamento Vasco.

viernes, 30 de septiembre de 2016

Sin duda, no es culpa de Pili

Aunque esta semana el PSOE ha "secuestrado" los comentarios políticos, en Euskadi hay más temas de interés.
La situación de Podemos en el País Vasco es uno de ellos. Roberto Uriarte así lo ha visto y yo lo comparto:
La actual dirección política vasca vino a traer a Euskadi un experimento político: poner en práctica la variable más radical y fundamentalista de la hipótesis populista. Hablando en plata: vender humo.

Con pleno apoyo de la dirección estatal y en unión de Equo y de Izquierda Unida, Podemos ha conseguido 150.000 votos en las elecciones autonómicas. Ha perdido casi dos de cada tres votos de los conseguidos hace dos meses. Ha obtenido casi los mismos votos que obtuvo hace año y medio en las elecciones forales Podemos Euskadi concurriendo en solitario y sin apoyo alguno de la dirección estatal. Si quitamos los votos que aportan Equo e Izquierda Unida, Podemos ha perdido unos 30.000 votos de los que obtuvo hace año y medio, cuando competía en el peor de los escenarios posibles y sin otra fuerza que el entusiasmo de los círculos y la militancia vasca. La actual dirección ha dicho que se trata de un éxito histórico. Creo que hablarle así a la ciudadanía supone en sí mismo una forma de entender la política.

Lo peor que puede suceder es que se opte por no reconocer la realidad. No cuestionarse por qué la misma ciudadanía que ha apoyado entusiastamente a Pablo Iglesias y al proyecto de Podemos para Madrid hace dos meses ha dado masivamente la espalda al proyecto para Euskadi de Podemos. Lo peor que puede suceder es que se busquen chivos expiatorios. Y hay que hablar claro. La responsabilidad de esto que algunos consideran un “éxito histórico” no es de Pili Zabala. Ella ha hecho lo que ha podido y me dolería que la convirtieran en el muñeco roto de los experimentos de algunos.

La actual dirección política vasca vino a traer a Euskadi un experimento político: poner en práctica la variable más radical y fundamentalista de la hipótesis populista. Hablando en plata: vender humo. No posicionarse en nada, pasar de puntillas sobre todo, no enfrentarse con nadie y toneladas de palabras bonitas. Efectivamente, en algo tienen razón. En que Euskadi tiene una cierta cultura política. Precisamente por eso, en Euskadi no se puede ganar vendiendo humo.

Lo que ha sucedido no es responsabilidad de Pili. Lo es de quienes no entienden que hay formas de hacer que no se pueden importar en sociedades con cierta cultura política.

No veo ninguna razón para el triunfalismo, ni en Podemos ni en el resto de fuerzas de izquierdas, que no han conseguido presentar a la ciudadanía una alternativa creíble.